Abajo en la tierra,los campesinos trabajan seguros,mientras los guardianes vigilan el firmamento desde las torres.Las fortalezas voladoras surcan el cielo entre las torres, transportando a los guardianes desde una torre a otra.
Son elegidos desde su niñez para ser los guardianes del reino,al dejar la pubertad son llevados al mundo aéreo del que nunca volverán,su vida entera se desarrollará entre nubes y sol,y jamás pondrán un pie sobre la tierra otra vez,nunca se recostarán sobre la hierba ni navegarán por los siete mares.Son las cosas a las que renuncian para ser los admirados cuidadores del imperio.
Es el precio que pagan por ser los elegidos,por ser los vigilantes de los cielos.
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