viernes, 14 de mayo de 2010

UNA LAGRIMA POR FRANK

Ayer recibí tardíamente la noticia,no podía creerlo.

Había muerto uno de mis héroes de toda la vida,un hombre cuyo trabajo,junto con el de Roger Dean y Themo Lobos,fue responsable directo de mi afición y amor por la fantasía y por el arte ilustrativo y me impulsó sin saberlo ni pretenderlo a realizar mis propias creaciones.

Es que para mí,Frank Frazetta no era cualquier dibujante o ilustrador,sino el verdadero standard de la ilustración fantástica moderna.Un hechicero cuyo pincel mágico nos transporta a mundos inexistentes,pero que gracias a su visión y talento parecen reales.
Sus escenas llenas de movimiento son tan sensuales como épicas y con una elegancia sorprendente,escenas que ya no serán creadas por él.¡Cómo olvidar esa maravillosas portadas de los libros de Conan The Barbarian!

Tal vez por eso sea que tengo una opresión en el alma,una pena profunda.

Mientras escribo lo que siento una gota de tristeza rueda por mi mejilla y cae en un charco de tinta.

Sí,ya sé que estaba enfermo,pero eso no es gran consuelo ahora que ya no está con nosotros.

Hoy debe estar con su querida Ellie,pintando ángeles en el Paraíso.

No voy a incluir alguna de sus obras maestras,me limitaré a rendirle un humilde homenaje a su arte a través de alguno de mis propios dibujos,uno de tantos basados en los temas que él inspirara en mí.Pues la marca de un verdadero maestro no está en la copia que sus seguidores hagan de su trabajo,sino la capacidad que ese trabajo tiene para inspirar nuevas imágenes en nosotros,los que nos quedamos.

Otra gota de nostalgia corre por mi mejilla esta noche,una lágrima que se escapa.

...una lágrima por Frank Frazetta.


miércoles, 5 de mayo de 2010

PEQUEÑOS DRAGONES

Salen temprano en la mañana a beber el rocío de la hierba y a juguetear con las pequeñas criaturas del jardín.

Son tan livianos que se pueden posar sin peligro sobre las frágiles hojas para alcanzar los dulces pétalos de las flores.

Al verlos tan diminutos e inocentes nadie pensaría que crecerán hasta transformarse en las sombras aladas que aterrorizan a los habitantes de los pueblos cercanos,pues esos dulces pequeñitos no son otra cosa que Dragones Voladores.

Algún día serán feroces gigantes que asolarán la comarca.Es su destino.

Pero no aún,por ahora sólo son graciosos y suaves bebés que nada saben de su sangrienta herencia ni de su futuro violento.

Hoy sólo saben de rayos de sol matutinos,de ricas flores y de juguetonas mariposas en el Jardín de los Pequeños Dragones en la jungla de la Terra Australis.